martes, 12 de junio de 2012

Cansada del mundo


Hace unos años, bastantes, vi una foto de Mrs. O de joven. La foto no era especialmente artística, pero hubo algo que me llamó muchísimo la atención: el espejo que tenía al lado. Le pregunté por él, si aún lo conservaba, y su respuesta fue afirmativa. Como el espejo en cuestión estaba ya guardado en el baúl de los recuerdos, tuve la suerte de heredarlo, y aún hoy forma parte de la decoración de mi dormitorio.

El espejo no es nada del otro mundo. No tiene un marco espectacular que haga que sea precioso. Al mirarte en él no te ves más alto, más delgado e infinitamente más guapo. Nada de eso. Es simplemente un espejo de 25x31centímetros… pero tiene mensaje. Y eso, precisamente, es lo que hizo que me gustara tanto.


Sí, “prohibido enfadarse de 0 a 24 horas”.

En los últimos días, cada vez que entro en mi habitación, veo el espejo y pienso: qué difícil es cumplirlo. Y si es complicado es por la situación que estamos viviendo. Ya os hablé hace unos días de que con la crisis poco a poco he ido perdiendo ilusión y confianza. Ver los telediarios y leer la prensa no ayuda en absoluto a recuperar parte de las pérdidas, y desconectar en las redes sociales, desgraciadamente, tampoco. Es entrar en Twitter y no dejar de leer a personas quejándose por todo. Y yo, la verdad, ya empiezo a estar cansada de tantas quejas sobre la crisis, Bankia, el rescate, la prima de riesgo, y demás familia. Y si no es de eso, cualquier excusa es buena para quejarse. Por un momento pensé que algo había pasado en el mundo para que nadie, absolutamente nadie, escribiera nada bueno. Incluso me planteé que el mecanismo de dicha web había cambiado y ahora era para escribir quejas en 140 caracteres. Pero no, por suerte no todo el mundo está a gusto con tanta queja. Leer este tweet de Tylkonatalka me dio algo de esperanza:


Y de repente recordé que estamos inmersos en una Eurocopa y, una vez más, estamos entre los favoritos y podemos entrar en la historia del fútbol. Pero… ay, las quejas volvieron. Una avalancha de tweets diciendo cosas como “con la que nos está cayendo y la gente solo sabe hablar de fútbol… ¡qué vergüenza de país!”, y el pesimismo volvió a mí. “Con la que está cayendo y yo ilusionándome por algo tan insignificante como el fútbol”, me dije a mí misma. Pero las palabras de Tylkonatalka resonaron en mi interior y pensé “¡qué coño! ¡¡Me ilusiono!!”. Y me ilusiono a gusto, esperando cada partido como si fuese el último, celebrando cada gol como si no hubiese mañana. Y lo comentaré en Twitter. Porque sí, porque con la que está cayendo quiero/necesito encontrar algo que me ilusione, que me dé alegría, que me haga querer despertarme cada mañana. Y si esa alegría me la da algo tan insignificante como el fútbol, pues bien. A quien no le guste, que no mire. Que entre mis tweets no aparezca ninguno quejándome de la situación financiera no quiere decir que no me duela, pero, sinceramente, la vida son dos días y prefiero pasarlos ilusionándome con algo insignificante como el fútbol que quejándome a todas horas por cualquier cosa. Me guardo mis quejas para mí misma. ¿Guardándomelo todo me puedo provocar una úlcera? Pues bueno, me la provoco a mí misma y no al resto del mundo.

Así que, bueno, que cada cual siga viviendo su vida como quiera. Los que seáis felices estando en el “comando quejas”, perfecto. Yo prefiero disfrutar de pequeñas tonterías y compartirlas, y guardarme mis quejas para mí misma.




Añadido posterior:

En ningún momento era mi intención generar un debate sobre los usos y posibilidades de Twitter. Pensaba haber dejado claro al final que cada uno puede/debe usarlo como le dé la gana, pero veo que no ha quedado nada claro. Simplemente me he referido a dicha red social, red informativa o llamadlo como queráis para que se entendiera mejor el pesimismo generalizado del que estoy cansada, pero veo que ha sido inútil.

14 comentarios:

  1. Claro, es que con la que está cayendo está mal visto no estar deprimido y encerrado en casa con todas las persianas bajadas las 24 horas del día. Y estar llorando todo el día porque la prima de riesgo tal y cual. Ya de paso, nos suicidamos todos y asunto concluido ¿no?

    De verdad, luego dicen que si hay que ser optimistas... ¡Pero si cuando te ilusionas por cualquier cosa te llaman de todo!

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    1. No sabes cuantísimo odio la frase "no sé cómo dicen que hay tanta crisis si los bares están siempre llenos...". Bastante tiene la gente con los problemas que hay como para no poder despejarse de vez en cuando. Al final vamos a tener que plantear seriamente lo del suicidio colectivo y arreglado XD

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  2. Hola,

    partiendo de la base que creo que cada uno puede usar twitter como quiera y si algo no me gusta leerlo con dejar de seguirlo queda solucionado "el problema", sí que pienso que si no fuera por estos momentos como fútbol, tenis, ... o lo que a cada uno le proporcione una mínima gotita de ilusión o llámese X, creo que estaríamos amargados las 24 horas del día, cosa que tampoco es muy recomendable pero cada uno es como es y con no mirar o leer lo que no me gusta a mi por lo menos me es suficiente.

    Un saludo :-)

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    1. Tienes toda la razón, cada uno que use Twitter como quiera, que para eso está, pero igual que unos aguantamos la amargura de otros sin decir nada (vale, salvo las veces que me desahogo en el blog... que a veces con 140 caracteres no da ni para empezar, jajaja) espero que los demás hagan lo mismo con mis tuits que no les gusten. Así que estar días leyendo cada subida y bajada de la prima de riesgo sin quejarme, y que por 4 tonterías que pongo de fútbol me digan "harías mejor preocupándote por cosas importantes y no esas chorradas", pues cansa un poco.

      Y así, acabáis pagando los pobrecillos que leéis el blog XD

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    2. Bueno ya sabes lo que dicen en twitter ... y si no lo dicen ya me lo invento yo ahora xDD ... "a tweets necios, unfollow que te crió" jajaja ... por lo demás, ya sabes que es un placer leerte :-)

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    3. Jajajajaja me ha encantado la frase.

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  3. Entonces tu nueva entrada no es una queja¿?
    Unos utilizan twitter, otros sus blogs pero al fin de cuentas todos nos quejamos pq el mundo no es perfecto. Y por suerte hoy tenemos medios como las redes sociales que nos permitan expresar y que nuestra opinión llegue a miles de personas.


    PD: muy chulo el espejo!

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    1. No lo había pensado como una queja sino como una forma de desahogarme por el pesimismo generalizado que veo en todas partes y por el hecho de que cuando te ilusionas por algo, si a otra persona no le parece lo suficientemente digno, te censure por ilusionarte. Lo de Twitter era solo un ejemplo, cada cual que lo use como quiera, claro está. Eso ya lo he dicho más de una vez en el blog.

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    2. Yo creo que es justificado el pesimismo, lo que no tienes que permitir que te desilusionen. Todos necesitamos una vía de escape y si ahora te ilusiona la Eurocopa pasa de las opiniones de los demás. Cada uno tiene su forma de evadirse de la realidad y tu tienes el fútbol pues ¡olé!
      Vamos que después de que España fuera rescatada Rajoy se piro a ver el partido, y un ciudadano no puede¿?
      Peor me parece lo primero que en sus manos esta salir de esta y el viaje lo pagamos todos...
      Al resto nos toca verlas venir, así q cada uno es libre de entretenerse mientras espera.
      Además con lo falsa que es la gente sabes que el 90% de los que ahora dicen "como puedes pensar en fútbol con la que cae" seguro que si España juega la final todos piensan en fútbol.

      En resume no permitas que nadie te amargue el día :)

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    3. Se intenta, pero a veces es taaaaaaan complicado que no lo amarguen... jajajaja Tendré que seguir mirando el espejo e intentar conseguir lo que dice la prohibición.

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  4. Te leí en el trabajo y casi me pongo a aplaudir con las orejas.
    Ese tweet en cuestión lo escribí después de leer un tweet que decía, refiriéndose a la campaña Somos, "el año que viene en lugar de poneros algo del revés podéis poneros una etiqueta que diga "Retard"". Y el día anterior había leído algo sobre aprovechar para hacer "selección natural".
    Cada cual tiene sus puntos de vista y para mí casi todo es respetable (siempre que no vulnere los derechos humanos). Entiendo que la misma cosa a unos les parezca bien y a otros una estupidez. Pero no entiendo esas ansias de faltar y el regodearse en el insulto. A mí me gustaba muchísimo Twitter porque lo usaba para desconectar, para reírme. Me encanta cuando la gente lo usa para contar cosas de su día a día que te hacen sonreír, me gustan las fotos de desayunos o de "mira qué cosa tan rica acabo de cocinar", los "mirad qué cosa tan curiosa he encontrado por la calle" y los "¿habéis visto qué vestido tan bonito me he comprado?". Me muero de la risa con esa gente con chispa que se ríe de sí misma. Y ahora que estoy lejos muchas veces agradezco abrir Twitter y enterarme así de lo que está pasando en España.
    Pero no puedo con la amargura y la mala leche sin razón o, por muy razonable que esta sea, dirigida hacia quien no tiene ninguna culpa. Nunca me ha gustado la gente que se cree superior y últimamente estoy viendo a muchos que se sienten muy superiores intelectualmente y con el derecho (quizás hasta el deber) de cargar contra los demás.
    Me repatean los tweets ofensivos... casi me sale una úlcera leyendo "chistes" como que debería estar penado por la ley el fabricar ropa con estampados más allá de la talla 44 y otras cosas por el estilo.

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    1. Eso es lo que me gusta(ba) de Twitter, cuando leías algo y te hacía reír, te ayudaba a saber chorradillas de gente que te cae bien... Pero de repente noto una ola de pesimismo imparable, y no solo en Twitter sino en todas partes, lo único que ahí es donde más tiempo paso. A veces con tanto malrollismo hasta las believers me dan penilla cuando se meten con ellas porque sí; como si hicieran algún mal a los demás por escuchar y defender a ese chico (cuando el mayor daño se lo hacen a sí mismas oyendo esa música... es broma).

      Hace poco estuve en unas charlas en las que nos dijeron que ahora mismo lo más importante era pasar de la gente pesimista, que es la que más abunda, y escuchar a optimistas y emprendedores. Que se iban a meter contigo por eso, pero que te ayudaría a sobrellevar la situación sin querer pegarte un tiro. Y, chica, me animó mucho. Porque si me pasara el día informándome de la crisis y demás, te aseguro que al final lo que más me gustaría sería quitarme del medio y adiós problemas para siempre.

      El caso es que el pesimismo corre como la pólvora y muchos aprovechan la situación para meter miedo al resto, y en vez de intentar ser optimistas para salir de esta, parece que solo quieren que estemos acojonados esperando el gran hostión para decir tranquilos "si es que esto se veía venir... ya lo dije".

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  5. Ahora les ha dado por el fútbol. A mí no me gusta el fútbol, no me ha interesado nunca (bueno, excepto Campeones, estaba enganchadísima)... pero, sinceramente, no creo que el que te guste el fútbol te vaya a convertir en gilipollas. A parte de que no me interese, hay muchas cosas que me repatean del fútbol... sin ser fan de ningún deporte en particular, me jode que "noticias de deportes" sea habitualmente sinónimo de "noticias de fútbol", me jode cuando cambian la programación por culpa del fútbol, me jode que la gente se ponga histérica y haga un montón de ruido y tú encima tengas que ser súper comprensivo (¿qué pasaría si yo me hubiera puesto a gritar y tirar cohetes cuando al fin Castle se tiró a Beckett?) y sobre todo no entiendo que los futbolistas tengan unos sueldos astronómicos (pero vamos, no es culpa suya... si a mí me dicen que me van a pagar 5 veces más por mi trabajo no seré yo quien diga que no). Ahora que vivo en el país donde se celebra la Eurocopa llevo meses haciéndome a la idea de que voy a acabar hasta el moño de ella (nos van a invadir los turistas, puede que precisamente por eso suban los precios, me preocupan los hooligans tarados), pero resulta que no, todo lo contrario (de momento). Hay un montón de tontos y de tarados a los que les gusta el fútbol, pero también hay un montón de gente normal a la que le gusta el fútbol. Y creo que los normales son mayoría. Y a mí me parece estupendo que se diviertan y se entretengan y que disfruten y se ilusionen con el fútbol. Y eso no convierte en gilipollas a nadie. Que la crisis, el rescate y los recortes de Rajoy no se acabarán si la selección española gana la Eurocopa, pero tampoco van a acabarse porque insultes a todo aquel al que le gusta el fútbol.

    Y que sí, que cada cual puede hacer con su cuenta de Twitter lo que quiera, usarla para lo que quiera y al que no le guste que no mire. Yo no suelo echar a nadie de mi TL la primera vez que escribe algo que me parece mal, porque puede tratarse de un caso aislado. Tampoco soy, desde luego, la clase de gente que escribe para quejarse. Me dedico a esperar un poco. Últimamente ha habido muchos tweets que han sido "la gota que colma el vaso" y voy a hacer una limpieza grandísima uno de estos días. Porque no pienso dejar que nadie me amargue... y ya llevo días sin acercarme a Twitter solo por no leer según qué cosas...

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  6. Además (y con esto voy a terminar por fin este rollo terrible que estoy soltando), son muy alarmistas. El otro día, a cuento de lo del rescate, leyendo los tweets, me imaginaba a todas las familias de España arremolinadas frente a la tele y muertas de miedo. Acabé preocupadísima y me costó dormir pensando en qué iba a ser de mi familia. Y al final, cuando los llamé, me tranquilizaron ellos a mí.
    Así que, tal como está el patio, creo que hace falta un poco de fútbol o lo que sea que pueda distraer un poquito al personal. No como cortina de humo, para que los que mandan hagan y deshagan a su antojo sin ninguna resistencia, pero sí para que no acabemos tarados todos.

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