Pequeñas cosas que me hacen feliz (I)

Supongo que es algo que se aprende con el tiempo y la experiencia. Cuando soñamos con ser 100% felices tendríamos que asumir que es solo eso, un sueño, y que la felicidad completa es prácticamente imposible conseguirla. No penséis que es una actitud derrotista. Yo más bien la veo como una forma de ser inconformista, de superación. Si crees que ya lo has conseguido todo y eres feliz, te conformas, te estancas y aparece la monotonía, que hace que dejes de ser tan feliz. Lo que he dicho: no hay felicidad al 100%.

Por eso lo mejor es centrarse en pequeñas cosas que nos den algo de alegría a nuestras vidas. Esas pequeñas tonterías que te sacan una sonrisa cuando más la necesitas. Pueden ser las mayores chorradas del mundo. Es más, reconozco que en mi caso muchas lo son. Pero lo importante es ser feliz.

Y una de esas cosas que me hacen feliz son los monos. Veo uno y automáticamente me convierto en una niña de 2 años que se sorprende y disfruta como si no existiera nada más. Me encantan, y lo mismo me da que sea en foto, en movimiento o en peluche. Si haciendo zapping en algún sitio están emitiendo un documental de monos, podéis tener por seguro que será esa la cadena en la que me quede. Y en los momentos bajos, nada como ver la siguiente foto para que automáticamente aparezca una sonrisa en mi cara.

 Si es que algunas que nos conformamos con poca cosa…