Pechugas en salsa de tomate

Nueva entrada forjada entre fogones dedicada a los cocinillas del blog.

Como veis, el título no deja lugar a la imaginación. Tal vez para vosotros sea una receta de lo más normal, pero en mi casa no era muy frecuente (es más, era hoy la primera vez que preparaba el pollo así), así que podríamos catalogarla en comidas exóticas. Y además hay que tener en cuenta que ha sido todo un reto para mí, ya que me he propuesto hacerla improvisando la receta yo misma (cosa que no suelo hacer, solo por puro perfeccionismo). Vamos al lío.

Ingredientes:
(lo siento, hoy no hay medidas, así que lo ponéis todo a ojo)

• Pechugas de pollo fileteadas
• Tomates, preferiblemente maduros
• Cebolla
• Ajo picado
• Perejil picado
• Sal
• Azúcar
• Aceite
• Agua
• Una pastilla de avecrem

· Ponemos un chorrito de aceite en una cazuela. Cuando haya cogido temperatura añadimos la cebolla y los tomates troceados, y lo dejamos rehogar. Añadimos sal, ajo y perejil picados y una cucharadita de azúcar (para quitar la acidez del tomate).
· Cuando esté bien rehogado, lo pasamos por la batidora para que se haga la salsa.
· Echamos la salsa otra vez en la cazuela, añadimos el avecrem y dejamos que hierva para que se deshaga la pastilla. Cuando esté, añadimos las pechugas fileteadas.
· Si veis que no se quedan cubiertas de salsa, podéis añadir un poco de agua (pero no os paséis, que si no se quedará soso y aguachinado). Dejar cocinar a fuego medio hasta que estén las pechugas hechas.
· Servir, comer y tener cuidado, porque como la salsa esté medianamente bien, es prácticamente imposible no untar pan jajajaja

Como podéis comprobar la receta de hoy es sencillita, no tiene tanto lío de hornos como la de las berenjenas, y se prepara en un momento.

Si os da por experimentar, ya me contaréis vuestros resultados. Y si le añadís alguna cosilla más como pimientos, o champiñones...